El nombre “lágrimas de sirena” suena a historia dramática sacada de la mente de los hermanos Grimm. Aunque no es un cuento, sí que es una historia dramática. Con giros que nos ponen los pelos de punta y un desenlace que aún está por ver.

Ya conocemos la noticia, en navidades la costa se Galicia se vio azotada por una marea de pélets que amenaza con aumentar la contaminación marítima existente.

¿Qué son los pélets?

Lágrimas de sirena

Los pélets son la materia prima con la que se fabrica el plástico, son unos polímeros de polietileno que derivan del petróleo. Debido a su alta resistencia, se genera en grandes cantidades (alrededor de 80 millones de toneladas anuales). Lo malo es que todavía no se ha encontrado la fórmula para que sean biodegradables.

Se utiliza en la fabricación a gran escala de productos para la vida cotidiana. Bolsas, globos, botellas, juguetes, cables, tuberías, biberones, ropa o elementos para material industrial y médico.

Tienen forma redondeada y miden de 3 a 5 milímetros de diámetro. Su proceso de formación funciona de la siguiente manera:

  1. Se funde produciendo un líquido viscoso, parecido a la textura de la miel.
  2. Se inyecta o invierte en el molde seleccionado.
  3. Se deja enfriar y endurecer para que adopte la forma deseada.

Según datos de Plastics Europe, más de 50.000 fabricantes del mudo utilizan este material para la creación de productos.

Efectos a medio y largo plazo

El polietileno se considera un polímero seguro. Su radioactividad química es muy baja y al ser inerte, se puede usar en muchos sectores considerados delicados desde el punto de vista de la salud y la alimentación. Con respecto a los pélets, todavía no sabemos con exactitud qué efectos secundarios pueden tener en la salud humana.

Lo que sí sabemos es que es nocivo para los animales marinos. Y que éstos forman parte de nuestra alimentación, por lo que podría tener efectos a medio y largo plazo.

No obstante el polietileno no es el único elemento dañino que llega al mar. Según Greenpeace, se calcula que entre 5 y 50 billones de fragmentos de plástico van a para al océano. El 70% acaba en el fondo marino, un 15% en la columna de agua y otro 15% en la superficie.

Lágrimas de Sirena

Una vez que el plástico llega al océano, algunas piezas son colonizadas por bacterias, algas microscópicas y hongos. Esto hace que sean más jugosos para los animales marinos y que lo acaben ingiriendo, lo que provoca que mueran o que afecte a su crecimiento y reproducción. Como por ejemplo, las malformaciones en los erizos de mar. Algunos de los colonos del plásticos son especies invasoras y patógenas. Utilizan el plásticos al que se ha adherido como vehículo de transporte para llegar a otras regiones del océano y crear un desequilibrio en ese lugar.

Crisis de los Pélets

En el caso de estas lágrimas de sirena, dado su tamaño flotan en la superficie y puede ser arrastrado por la corriente o el viento fácilmente. No se pueden retirar con redes ya que también se arrastraría a organismos del mismo tamaño que son claves para el correcto funcionamiento del ecosistema marino.

Eventualmente los pélets llegan a la arena, donde los más grandes podrán ser recogidos. Sin embargo para recoger los más pequeños habría que tamizar la arena, como con la harina, un proceso que llevaría años.

Que una playa española esté asolada por pélets no es una novedad. Las playas de la Pineda (Tarragona) y de Lambra (Isla de la Graciosa) llevan años con este problema. Y cuando el buque Toconao perdió su carga en Galicia, los protocolos de actuación fueron lentos. Lo que provocará consecuencias negativas para la industria pesquera y marisquera.

Lágrimas de sirena

No obstante, un aspecto positivo de esta crisis, a la que desde hace poco se la llama como la Crisis de los Pélets, es la llamada de atención que ha provocado en la población. Muchas personas se han implicado de forma masiva en la recogida de estos productos en las playas. Los medios se hacen eco y poco a poco se está dando a conocer la gravedad del problema y sus implicaciones.

Es por eso que en España Recicla hemos querido abordar el tema de las lágrimas de sirena. Como os decíamos al principio, la historia tiene giros y aun se desconoce el desenlace. Esperamos que con ello hayáis podido comprender un poco mejor porqué esta crisis ambiental es un problema que nos acabará afectando a todos en mayor o menos medida y que cuanto antes seamos conscientes de ello, antes podremos poner los medios a nuestro alcance para frenarlo.